Obatalá, rey de la tela blanca
nunca teme a la venida de la muerte.
El Padre del Cielo será siempre la regla
de todas las generaciones.
Te pido que disuelvas mis cargas y problemas
rápido y suavemente.
Dame el poder para manifestar abundancia.
nunca teme a la venida de la muerte.
El Padre del Cielo será siempre la regla
de todas las generaciones.
Te pido que disuelvas mis cargas y problemas
rápido y suavemente.
Dame el poder para manifestar abundancia.
Deja al descubierto el misterio de la abundancia.
Concédeme la abundancia en mi vida.
Padre del sagrado bosquecillo,
el dueño de todas las bendiciones
aumenta mi sabiduría,
que yo me vuelva como la tela blanca.
Eres el Espíritu de Luz a quien yo serviré.
Eres quién crea cuando ha escogido qué crear.
Eres el Espíritu de Luz a quien yo serviré.
Él es quién me envía aquí.
Es el Orisha a quien serviré.
Eres quién crea cuando ha escogido qué crear.
Eres el Espíritu de Luz a quien yo serviré.
Él es quién me envía aquí.
Es el Orisha a quien serviré.
Se despierta temprano para conducir
su carro alrededor del pueblo,
para atender sus peticiones
y cuidar que no les falte nada.
Espíritu turbulento de luz que construye
Espíritu turbulento de luz que construye
su casa en medio de la selva,
padre mío Obatalá,
cuide de mi y los míos,
que no pasemos ninguna necesidad,
que tengamos las manos llenas,
que tengamos bienestar
y que alcancemos el progreso.
Protector de la tela blanca yo lo saludo.
Padre del sagrado bosquecillo.
Gracias, Obatalá, mi padre.
Asé.
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