(Nuestra Señora del Sagrado Corazón
es patrona de causas difíciles y desesperadas)
¡Oh mi Señora Santísima,
¡Oh mi Señora Santísima,
dueña del Sagrado Corazón!
del gran poder que tu Hijo divino
te otorga sobre su Corazón adorable.
Con inmensa fe y confianza
del gran poder que tu Hijo divino
te otorga sobre su Corazón adorable.
Con inmensa fe y confianza
en tus obras y merecimientos,
acudo hoy a ti a implorar tu protección.
acudo hoy a ti a implorar tu protección.
¡Oh bendita guardiana y tesorera
del Sagrado Corazón de Jesús,
de ese Corazón que es
de ese Corazón que es
fuente y manantial inagotable
de todas los favores y gracias,
y del que puedes disponer a tu gusto
para derramar sobre los hombres
todos los tesoros de amor y de misericordia,
de luz y de salvación que encierra!
de todas los favores y gracias,
y del que puedes disponer a tu gusto
para derramar sobre los hombres
todos los tesoros de amor y de misericordia,
de luz y de salvación que encierra!
Hoy te imploro y suplico
que escuches mi plegaria,
que escuches mi plegaria,
y que atiendas mi petición:
(Hacer la petición)
Es tanta la fe que te profeso
que seguro estoy de alcanzar
el cumplimiento de mi causa,
que me abruma, entristece,
y genera malestar a mi vida,
tu lo sabes mi Señora,
y puesto que eres Madre mía,
tu infinita bondad
tu lo sabes mi Señora,
y puesto que eres Madre mía,
tu infinita bondad
no ha de dejarme en el abandono.
¡Oh mi Señora del Sagrado Corazón!,
acoge favorablemente mi ruego
y dígnate atenderlo.
¡Oh mi Señora del Sagrado Corazón!,
acoge favorablemente mi ruego
y dígnate atenderlo.
¡Así sea!
¡Nuestra Señora del Sagrado Corazón:
¡Ruega por nosotros!
(Repítase tres veces)
¡Nuestra Señora del Sagrado Corazón:
¡Ruega por nosotros!
(Repítase tres veces)
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